A los que habitualmente leéis este blog os debería sonar el nombre de Fort McMurray porque mencionamos hace tiempo un proyecto que explica la realidad de esta ciudad situada en Alberta (Canada): Fort McMoney (David Dufresne, Toxa, ARTE y NFB, 2014). Algunos lo adoran y otros lo detestan. Para algunos es la combinación perfecta entre documental y videojuego y para otros un laberinto imposible de descifrar...La cuestión es que en su momento de máximo apogeo y esplendor (según como se mire y en términos capitalistas), se trató de la capital del petróleo a escala mundial, y de ello trata este docu-juego que obtuvo un gran impacto en su momento.
Pero las cosas, como la vida, siempre cambian (eso y la muerte son las dos únicas cosas seguras en la vida) y toman rumbos inesperados, y eso fue lo que sucedió hace unos meses a esta verde y fría localidad del Canadá. El infierno abrasó buena parte de su extensión, y el mismo director que una vez creó la obra de Fort McMoney volvió al lugar de los hechos para relatar esta vez una tragedia. Presentamos en este post el último proyecto de David Dufresne: Fort Mac and the Beast.
El incendio forestal que azotó varios días sin descanso la localidad de Fort McMurray se declaró el 1 de mayo de 2016 en el sector de servicios urbanos de la municipalidad regional de Wood Buffalo, pero debido a los fuertes vientos se extendió tan rápidamente que llegó a amenazar la ciudad entera y a sus más de 100.000 habitantes, que tuvieron que ser evacuados a marchas forzadas.
La magnitud del incendio, con el paso de los días, se volvió incontrolable a causa de las condiciones meteorológicas extremas y factores que no ayudaron durante el proceso. El avance del incendio prosiguió dejando más de 10.000 hectáreas calcinadas y 2000 viviendas destruidas en diferentes lugares de la ciudad de Fort McMurray solo en cuatro días. A pesar de la intervención del ejército canadiense, nada se pudo hacer para salvar buena parte de la ciudad y sus áreas colindantes.
A Fort McMurray se la conoce también por "Fort McMoney", que es como se conocía en lenguaje coloquial a esta ciudad al representar el mayor exponente de la prosperidad del boom petrolero en Canadá, algo parecido con lo que pasó con la fiebre del oro en el lejano oeste en su momento. Y es que Canadá es un importante productor de petróleo que posee las terceras reservas de crudo mundiales, solo por detrás de Venezuela y Arabia Saudita.
El 95% de éstas reservas se encuentran en la provincia de Alberta a partir de una mezcla de arcilla, arena, agua y bitumen (un derivado del alquitrán) de la cual se obtiene un producto similar al petróleo. Hasta finales de los años 80 la explotación de las reservas de arenas bituminosas era muy lenta porque el petróleo no se cotizaba mucho, pero con la mejora de la tecnología y a la subida desorbitada de los precios del barril de petróleo en el mundo, Canadá aceleró la explotación de sus reservas. Fort McMurray se convirtió en el epicentro de esta realidad.
En sólo unas décadas, la población de Fort McMurray se cuatriplicó, hasta el máximo de 125.000 habitantes en 2015 gracias a la extracción de petróleo. En 2014 Fort McMurray estaba en su máximo apogeo. Ese año se inauguró un nuevo aeropuerto que costó una barbaridad. Pero como todo lo que sube baja, el crecimiento se detuvo en 2015 con la caída en los precios del petróleo. Este incendio, considerado el desastre natural más costoso en la historia del país, solo ha empeorado las cosas.
A pesar de su gran éxito antaño, la realidad más cruda hoy impera en una ciudad en silencio que ha quedado casi reducida a cenizas declarada por el gobierno de la provincia de Alberta como estado de emergencia. Se calcula que unos 1.600 edificios en la ciudad están dañados o destruidos y en algunos vecindarios resultaron afectado hasta el 80% de los inmuebles.
El proyecto se vende como un 'Docspeed' (un tipo de documental realizado en poco tiempo, palabra extraña que aun no sabía que existía en el diccionario de los webdcos) y fue filmado y dirigido por David Dufresne entre el 10 y el 29 de junio de 2016, con la colaboración de Anita Hugi (Narrative Boutique) y del estudio canadiense AKFN (diseño y desarrollo, Montreal).
Para ser elaborado en tan poco tiempo, la verdad es que el collage que han creado da muy buena impresión y funciona bien con un ancho de banda reducido. La navegación se efectúa mediante desplazamiento del scroll -efecto Parallax- y se podría decir que teje una sobria crónica periodística de lo que sucedió esos fatídicos días. Pero, como siempre sugerimos, para opinar debéis experimentar el proyecto. Aquí os espera.