El 3 de julio de 2006 fue un día trágico para la ciudad de Valencia: un metro descarriló y dejó 43 muertos y varios heridos. De acuerdo con el gobierno de esa época, no hubo responsables a quien imputar. Esa tragedia sucedió pocos días antes del gran momento histórico que vivió la ciudad con la llegada del papa Benedicto XVI, el 8 de julio de 2006. Los medios públicos de comunicación silenciaron el caso, y el parlamento cerró la investigación en apenas un mes, concluyendo que no había responsables. Nunca se celebró ningún juicio al respecto.
En definitiva, lo sucedido se ocultó por todos los medios y todo parecía volver a la calma, pero no para un grupo de damnificados que decidieron que las cosas no podían acabar de ese modo. Y es que la fe puede llegar a mover montañas, predican algunas religiones. Y eso, según como se mire, es cierto. Así empieza el documental audiovisual La estrategia del silencio, en donde las víctimas reclaman la responsabilidad de los hechos a las instituciones y políticos implicados. Se trata de una obra imprescindible dirigida por Vicent Peris, escrita y producida por Dani Fabra y Àlex Badia, y producida por Joan Úbeda, Teia Roures, Salva Giménez y Andreu Signes, en una producción de Barret y Mediapro.
La estrategia del silencio es un magnífico testimonio de nueve arduos años de lucha de un grupo de personas contra el sistema político y otras instancias que se vieron envueltas por los daños colaterales que el incidente produjo, como los medios de comunicación y otras instituciones. El documental empieza con el fatídico día para recorrer una línea cronológica que contempla la llegada del pontífice máximo a la ciudad, la travesía por el desierto que sufrieron las víctimas, el oasis y disparador del programa 'Salvados' de la Sexta y la llegada y desembarco triunfal de las víctimas hasta el Parlamento Europeo, que atendió sus reivindicaciones.
Todo ello empoderó hasta tal punto al grupo de damnificados que se creó un espiral en forma de altavoz mediático, y eso contribuyó a que el gobierno se viera forzado a pedir perdón formalmente y las Cortes Valencianas abrieran una nueva investigación sobre el accidente, apuntando a 13 responsables.
Ese el valor real del documental en su máxima expresión: llegar a influir y transformar para bien el estrato social y cuestiones que no quedaron resueltas en un momento dado. Y este proyecto documental, un caso paradigmático del documental como herramienta activista y de reivindicación social.
Pero O responsables, nombre con el que se bautizó al proyecto hace años ya, es mucho más que eso, pues se constituye como una aventura -y desafío a la vez- en forma de proyecto transmedia que comenzó Barret en febrero de 2013 con el webdocumental O responsables (cuya plataforma online se ha erigido hasta el momento actual como el centro nuclear de esta propuesta), pero que además cuenta con varias extensiones muy interesantes como el programa que Salvados dedicó al tema, y que tituló como 'Los olvidados', el reciente Especial de La Sexta, el documental lineal con el que hemos empezado este post, su web de promoción, y la estrategia de redes sociales.
Este post sirve para presentar la últimas dos joyas de la corona de este proyecto: por un lado, el documental lineal, y por el otro, el último capítulo de la serie online que se ha ido produciendo paulatinamente, y que concluye con el denominado 'Memorial', que vendría a ser un compendio de toda la historia y su conclusión. Podéis acceder a los diferentes capítulos en estos enlaces, y especialmente a la novedad reciente del último, el sexto.
Capítulo 1: La comisión de investigación
Capítulo 2: La estrategia del silencio
Capítulo 3: La respuesta del gobierno
Capítulo 4: 7 años de lucha
Capítulo 5: Las causas del accidente
Capítulo 6: Memorial
Solo nos queda felicitar a los amigos de Barret por este enorme esfuerzo de producción transmedia y a la Asociación de víctimas por su tenacidad y convicción, que sigue firme a día de hoy. Porque, hubiera o no negligencia de las autoridades en relación a lo sucedido, ellos solo piden una investigación justa.
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